Llevo años leyendo a Machado sin preocuparme demasiado por su ideología política, simplemente disfrutaba de su poesía bohemia. Machado entró en mi vida sin avisar y sin tarjeta de presentación. Mi reacción fue: ¿Antonio Machado tenía un hermano que escribía poesía? Fue temprano, al mediodía, después de una noche de jueves. El profesor recitó Chouette con esa fuerza de siempre y yo casi lloré. Era tan real, tan de ahora - bien, cuando digo 'ahora' es 'entonces', pues ya han pasado casi 15 años - Jamás me planteé la relación entre arte e ideología, la verdad es que siempre me importó poco. Hoy, Elisa, compañera del instituto, pregunta a sus alumnos en un magnífico proyecto si '¿Eres lo que escribes?' Mientras, Marta, alumna de 4º A, se niega a leer a Manuel Machado, porque, aunque desconoce el proyecto de Elisa, entiende que somos lo que escribimos. Irremediablemente yo me pregunto: si Machado era lo que escribía, cómo podía ser la misma persona que,